Actividad en el aula de clases
El líder del grupo invita a cada uno de los participantes a un tiempo de oración para practicar la escucha del Espíritu Santo. En un ambiente de oración cada uno de los integrantes del grupo pregunta al Padre Celestial lo que piensa de ellos. Escribe la primera imagen o palabra que se le venga a la mente. Si no le encuentra sentido, le pregunta al Espíritu Santo, qué significa. Terminen el tiempo de oración agradeciendo a Dios su presencia durante este tiempo. Comparten todos su experiencia durante este ejercicio.
Actividad en la vida cotidiana
En los próximos días dedica un tiempo cada día en oración silenciosa escuchando al Espíritu Santo, haciéndole preguntas y esperando respuestas. Es probable que el Espíritu Santo te hable a través de sutiles pensamientos y sentimientos en lugar de una voz estruendosa.
